Una cabala singular

La primera vez que los vi quede eclipsado era como ver a una banda gringa en una escenario chileno, si hasta no creí que fueran chilenos, era el Luli pa leza y Ganjas salía a las 11:30 AM en uno de los escenarios secundarios en la cúpula, con un calor insoportable, adentro unas 500 personas capeaban el calor con rock, cerraron las puertas y de repente la noción del tiempo se perdió totalmente, parecía sábado en la noche a la 2 de la mañana Ganjas llenó el escenario con un rock psycodelico delirante.

Un amigo estaba de stage manager de dicho escenario, anteriormente me había hablado mucho de ellos, claro si llevaban mas de 10 años tocando en el sub mundo santiaguino, una vez que termino el show me acerque a saludarlo y decirle cuanta razón tenia, salí de la cúpula segado por el sol en dirección a ver a Mala Rodríguez, sintiendome el ser más estúpido por no conocerlos antes de ser tan maintream.

Y llego Julio mes donde tras varias gestiones y curatorias internas trabajaría personalmente con ellos, en los “Temporales Musicales de Valparaíso” en el teatro municipal, evento en el cual estaba de productor. Tras varias conversaciones telefónicas papeleos varios y atrasos ya venían viajando a un Valparaíso convulsionado por protestas y lluvias, un día de locos un día The Ganjas.

Se bajaron de la van cuando las lacrimógenas no se terminaban de disipar y temporal real se avecinaba, claro si cuando declararon el teatro Velardes, municipal de Valpo la variable conflicto protesta y congreso nacional al lado nunca fueron consideradas, por lo mismo ahora lo teníamos que bancar, por que todos sabíamos que las protestas eran por un causa justa.

No se hicieron atados y entraron a aprobar sonido, entre tallas y buena vibras comenzó el montaje meticulosos 0rdenados y a la vez volados reventaron el teatro con una prueba de sonido demoledora, vaticinio de lo que se venía. Ya era una banda mítica y el mito lo acrecientan con hechos y sonido.

Ya habíamos pasado por mucho y ahora íbamos a almorzar, a un local extraño para sus andazas la puerta de Alcalá hotel restaurante de la subida ecuador que tiene el grave problema de no tener espacio para estacionar autos, además de tener un cementerio encima, tal como lo dijo Lukas, Valparaíso es la única ciudad del mundo donde los muertos Están arriba de los vivos.

El local bien fino por así decirlo estaba prácticamente vació, entre historias y anécdotas comenzamos a almorzar, cuando de la nada baja de las escalera un señor de terno con serios problemas de equilibrio.

El individuo se sienta en el restaurante cerca de nosotros y comienza preguntarnos, ¿Por que no estábamos protestando?, ud son jóvenes vayan a protestar, el bajista lo mira y le dice amablemente señor por si no se ha dado cuenta hace años que dejamos de estudiar.

Pero igual son jóvenes que la educación, yo estoy aquí por unos días, quiero vino, entre balbuceos despotricaba versus el mundo versus nosotros y el país, mientras se le confundían las ideas se ensaño con la banda. Si ud fueran mis hijos estaría protestando. Señor venimos a tocar esa es nuestra forma de hacerlo, en eso bajo una señora casi en el mismo estado que el señor. Pidieron unas cerveza en el bar y tras la negativa desaparecieron por el mismo pasillo que entraron.

Tras el incomodo momento llego un mesero a pedirnos disculpas, el caballero había estado bebiendo todo el día y la noche, a lo que los ganjas le respondieron no te preocupes ya nos extrañaba que no pasara.

¿Que no pasara que?

Nosotros somos un imán de jugo.

¿Como es eso?

Lugar a donde vamos siempre llega un curado o alguien rancio a conversarnos siempre, es como una cabala, es mas pensábamos que aquí iba ser difícil que pasara pues está vació aparte de ser un lugar tranquilo. Pero al menos ya pasó eso significa que nos va ir bien, A lo que remataron con una carcajada general.

Terminamos tomamos la van ya con la cábala cumplida solo restaba tocar, y valla que les fue bien, la producción tuvo su mas alto momento en los Temporales junto con ellos, coronando una tarde noche psicodélica con música. De recuerdo me llevo un almuerzo atípico y un vinilo firmado por ellos, pero creo que lo que mas recordare será la singular cábala donde los impresionados finalmente fueron ellos.

Un día en el desierto

¿Calama?, una vez estuve ahí

-¿Si?,Te apuesto que iba a san Pedro

Si justo

-La gente con destino ahí pasa por Calama, pero no se quedan por que es feo

Depende de como lo mires, pues cuando llegue para mi fue una sensación de alivio.

¿ Como es eso?

Era junio pero al desierto no le importan las estaciones pues siempre ha tenido su ciclo propio el camión que venia con nosotros desde Arica nos había dejado en el cruce a Tocopilla Calama.

-Si lo conozco.

Cuando despertamos salimos de la carpa que instalamos en la noche en el desierto, había sol pero hacia un frío monumental, comenzamos a hacer dedo con sueño sin comida ni agua y cansancio a cuestas pues veníamos devuelta de Perú. Las primeras horas pasaban lentas y la mayoría de los autos y camiones iba con destino a Tocopilla, pero nosotros estábamos empecinados en conocer Chuquicamata, San Pedro y el valle de la Luna, así que teníamos que arribar a Calama.

Cuando el sol comenzó a calentar fuerte no cambiamos de ropa y el desierto se comenzó a manifestar debían ser como las 10 pero con calor todo pasaba mas lento incluso el flujo vehicular. Algo de sombra y protección nos daba un reten abandonado de carabineros que el desierto poco a poco carcomía pero pronto seria medio día y no habría donde ocultarnos del sol.

Ya estabamos entrando en desesperación y en eso oímos una explosión y a lo lejos se vio el típico hongo de humo de una explosión nuclear.

- ¿Que onda?

Eso mismo no preguntamos, no sabiamos si era realidad o alusinación hasta que la carretera y el suelo comenzó a temblar estrepitosamente acompañado del ensordecedor ruido y de pronto una ráfaga de viento nos boto al suelo a los tres.

Ante tanto desconcierto tuvimos miedo, pensamos teorías loca de que el calor nos estaba haciendo ver cosas, pasaban las horas y ya no sabíamos que hacer ya todo parecía irreal, tirados tres humanos en el desierto sin comida ni agua pensado que alguien se apiadara de nosotros pero ya eran pasado medio día y la esperanza disminuían.

Hasta que a las 14:00 hora paró una camioneta, a la cual nos acercamos el chofer desconcertado bajo el vidrio y el volumen de Pearl jam en chile y nos dijo con sorpresa ¿Todavía están aquí? Los vi en la mañana haciendo dedo voy para el mall de Calama ¿Les sirve?.

A lo que respondimos SI!

Recuerdo que le pregunte, oye eso es pearl jan en chile, y me dijo si yo fui yo tambien y nos fuimos conversamos sobre aquel épico concierto. Nunca pense que pearl jam salvaria de nuevo mi vida ni menos escucharlo a todo volumen en el desierto.

Bueno y así seguimos con el viaje, hasta que nos dejo en Calama, por lo mismo cuando llegamos para nosotros era el paraíso pues despues de estar tirado 8 horas en el desierto cualquier cosa era mejor que eso.

¿Oye y esa explosión de que era al final?

Bueno eso, creo que nunca lo sabremos.